El 18 y 19 de junio se celebró en Norcia la tercera edición del Glocal Economic Forum de ESG; una edición muy especial, que ha visto cambiar el escenario económico y político internacional en pocas semanas.
Las crecientes dificultades en la búsqueda de materias primas y la guerra en Ucrania, de hecho, han arrojado una luz completamente nueva sobre los temas tradicionales del foro, sostenibilidad, resiliencia y patrimonio cultural. Temas que siempre son muy queridos para nosotros en MCT Italia, y que a menudo abordamos en estas páginas web.
Precisamente de sostenibilidad ha hablado Andrea Marcantonini en su intervención referida a la publicación tradicional del evento, una reflexión articulada y que ha ofrecido diversos puntos de reflexión.
La sostenibilidad, de hecho, es un tema no solo actual sino muy importante y si como empresa hemos hecho todo lo posible para ayudar a minimizar nuestro impacto en el medio ambiente, es innegable que corresponda a nuestro gobierno, y a los gobiernos de Europa, la tarea de poner en marcha las políticas adecuadas.
Andrea señala que Italia sigue siendo la séptima potencia manufacturera mundial y que, sin embargo, ha practicado una política con poca visión de futuro con respecto a las materias primas.
Hoy en día, nuestro país depende de otros países para la compra de ciertos materiales, por ejemplo, Ucrania para el acero y los países asiáticos para el material electrónico y de alta tecnología. Algunos de estos últimos, China a la cabeza, no tienen políticas de producción ecológicas y, por lo tanto, contaminan mucho.
Cabe preguntarse, por tanto, qué sentido puede tener hablar de sostenibilidad si no se puede hacer, realmente, a nivel global.
Otro tema importante: qué dirección queremos dar a la sostenibilidad. Se habla muy a menudo de coches eléctricos y de emisiones cero, pero quizás deberíamos reflexionar también sobre cómo producimos la energía eléctrica necesaria para recargar las baterías. Y, tal vez, también sobre cómo planeamos eliminar estas últimas, una vez que se vuelvan inutilizables. El propio Akyo Toyoda, número uno de Toyota, ha expresado varias dudas sobre la sostenibilidad de los coches eléctricos, una clara señal de que tal vez el camino tomado debe ser revisado al menos. Andrea ha concluido su contribución con una invitación que es casi un llamamiento: sostenibilidad absolutamente sí, pero con un plan articulado y a largo plazo, que nos permita vivir esta transición y afrontar al mismo tiempo la crisis energética en curso.