¿Cómo logra una empresa como MCT Italy mantener su posición de liderazgo mundial, después de más de 50 años de actividad? No existen fórmulas mágicas: ciertamente se necesita compromiso y dedicación, pero también una actualización constante, para estar al día.
La vocación científica de nuestro fundador nos ha enseñado que, para superar los retos del mercado, es fundamental para nosotros invertir con tenacidad en tecnología y formación.
Nuestros procesos de automatización y los softwares de gestión y control desarrollados internamente nos permiten realizar productos a medida para nuestros clientes y mantener una posición destacada en el mercado global.
Pero esto no es suficiente.
Cada año invertimos en la formación de nuestro personal y en la actualización de las competencias adquiridas a lo largo de los años, no solo pensando en el rendimiento productivo, sino también en el bienestar de nuestros colaboradores.
Por supuesto, las máquinas que utilizamos requieren un alto nivel de especialización, y la actualización de su rendimiento va de la mano de las competencias personales de quienes tienen que utilizarlas.
Sin embargo, no es solo la formación técnica lo que nos interesa: un ambiente de trabajo sano, donde las personas disfruten trabajando, es un ambiente de trabajo productivo. Por esto, hemos añadido a los cursos como «Supply Chain Management» (Gestión de la cadena de suministro) o «Sistemas de alerta», otros que apuntan hacia direcciones alternativas como, por ejemplo, el de la «Inteligencia emocional».
Más recientemente, y para hacer frente a la actual situación pandémica, hemos propuesto a nuestros colaboradores un curso sobre la gestión de la ansiedad y el miedo al Covid-19. Sentimos que era nuestro deber ofrecer a las personas que comparten nuestro camino, la posibilidad de tener una ayuda y un apoyo en este momento tan particular.
No todos reaccionamos de la misma manera ante las situaciones estresantes, algunos luchan más que otros y esto puede hacer que su vida sea extremadamente compleja. Por ello, pensamos que proporcionar las herramientas adecuadas para tomar conciencia de la situación actual y de los propios miedos, podría ayudar a superar este momento de vacío. Lo hacemos por nosotros mismos y por los que están a nuestro lado, porque nos gusta recordar, en palabras de un poeta, que «ningún hombre es una isla».